Hoy me han animado a escribir sobre como conseguir extraer nuestros sentimientos de dentro y la verdad, creo que no soy la persona adecuada para hacerlo. Sin embargo, creo que sería bueno que hablásemos hoy de los bloqueos energéticos.
En el anterior post sobre meditación (puedes verlo aquí) se introdujo el tema de los chakras, enumerándolos y comentando sus características. Pues bien, los chakras como centros energéticos del organismo pueden estar bloqueados (cerrados) y esto puede provocar "manifestaciones" físicas en nuestro cuerpo. En un post futuro tengo pendiente hablar de como hacer limpiezas del aura, que está muy relacionada con los chakras, y así conseguiremos estar equilibrados.
¿Qué es lo que afecta al cierre de nuestros centros energéticos? Se puede decir que todo. Es decir, si no se mantiene una vida equilibrada y sana, eso afectará a nuestro flujo energético y provocará el cierre o bloqueo de algún chakra. Aparte de nuestros hábitos, hay otros hechos que también afectan a la circulación de la enérgía. Situaciones emocionales intensas pueden afectar a la circulación energética de una manera increible. Sentimientos como la ira, el odio, y sobre todo el miedo, pueden causar grandes bloqueos internos que puede resultar complicado arreglar.
Pero, ¿qué ocurre cuando un chakra se bloquea? Principalmente, empieza a afectar a los elementos relacionados con ese chakra. Por ejemplo, si estamos hablando del primer chakra, se podría provocar falta de apetito sexual, cansancio, etc. Aparte de afectar a los elementos relacionados, empieza a afectar al flujo energético interno. Con lo cual, si el bloqueo se prolonga en el tiempo, empezará a afectar a los chakras contiguos, provocando más síntomas.
De todos modos, la cosa no es tan catastrófica. Medicamentos, cambio de hábitos, psicólogos, terapias alternativas, etc., pueden ayudarnos a desbloquear estos centros energéticos, bien porque permiten a nuestra mente y cuerpo recuperarse por su acción directa, o porque nos dan una tregua para centrarnos en lo que realmente nos está haciendo daño.
Ya hemos visto que son los bloqueos, como se producen y que podemos hacer para mejorarlos. Ahora me gustaría centrarme, sobre una de las causas de los bloqueos: El miedo.
Los miedos son uno de los males endémicos de la sociedad actual. La mayoría son aprendidos de pequeños, aunque cuando somos adultos también podemos adquirir nuevos. Lo curioso del miedo, es que no somos conscientes cuando lo adquirimos. Es como los virus. Se instala en nuestro ser y se va haciendo fuerte. Poco a poco se va apoderando de nuestras conductas, y para cuando nos queremos dar cuenta, pensamos que nuestras manías y rarezas son fruto de nuestra personalidad.
El miedo acaba provocando bloqueos generales a nivel energético, y a pesar de que se actue sobre estos bloqueos para curarlos, vuelven a producirse. Es como cuando tenemos contracturas en la espalda provocadas por llevar peso de mala manera. Por mucho que trates la zona con masajes y alivies una temporada la tensión, esta volverá a aparecer si no eliminas la causa inicial. Con los miedos, sucede lo mismo.
Nuestras vidas, las de algunos más que las de otros, están condicionadas por los miedos, y hasta que no nos demos cuenta y actuemos sobre ellos, no conseguiremos eliminar completamente los bloqueos energéticos internos que nos provocan. Estos miedos, siempre están provocados por nosotros mismos. Nosotros somos los responsables de dejarles habitar en nosotros. Y quizás esta afirmación pueda provocar malestar en los que leen estas líneas, pero nosotros somos los responsables de nuestros miedos.
No quiero extenderme más. Solo me gustaría que reflexionáseis sobre los miedos que tenéis y que vais a hacer para poder sacarlos de vuestro cuerpo. Ahora que llegan las fiestas de semana santa, es un buen momento para la meditación. En mi caso, me aplicaré para eliminar los que todavía me quedan. ;-)
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